Descargar este capítulo en:

Proceso

Buen Conocer / FLOK Society como proceso de investigación colaborativa y diseño participativo

Buen Conocer – FLOK Society1

v. 1.0

18/03/2015

Autores: Xabier E. Barandiaran2,3,4, David Vila-Viñas5 y Daniel Vázquez6.

Contribuidor: Bernardo Gutiérrez7.

Resumen: El presente documento expone el proceso-red de investigación-acción Buen Conocer / FLOK Society, contrastando sus objetivos iniciales y diseño metodológico-político con un conjunto de indicadores de resultados finales. En particular, se destacan las innovaciones introducidas en cuanto al proceso de investigación abierta, en lo relativo a las licencias de sus productos pero también al carácter libre de sus infraestructuras técnicas, herramientas de investigación y métodos organizativos. Por otro lado, se incide en la combinación de distintos actores (expertos nacionales e internacionales, activistas sociales y representantes de instituciones públicas) dentro de una dinámica colaborativa de análisis crítico del capitalismo cognitivo, de integración de modelos alternativos sostenibles y de enunciación de recomendaciones de política pública en distintas áreas estratégicas para la transición hacia una economía social del conocimiento común y abierto.

Palabras clave: metodología; diseño participativo; cooperación; diseño de políticas públicas; investigación-acción participativa; FLOK; conocimiento libre; copyleft; economía social del conocimiento común y abierto.

Historia del documento: Este documento se compone de varias presentaciones e informes de resultados que se elaboraron a lo largo del proyecto, el principal de ellos elaborado al término de la Cumbre del Buen Conocer8. También se han incluido análisis y previsiones de los informes preparatorios del proceso, especialmente del elaborado por Xabier E. Barandiaran y Daniel Vázquez (2013) al inicio y que sirvió como hoja de ruta, conocido como “documento madre”, así como productos e informes del trabajo de coordinación de Xabier E. Barandiaran durante los meses de enero de 2014.

Cita del documento: Barandiaran, X. E, Vázquez, D., Vila-Viñas, D. (2015), El proceso Buen Conocer / FLOK Society: Investigación colaborativa y diseño participativo hacia una economía del conocimiento común y abierto (v.1.0). En Vila-Viñas, D. & Barandiaran, X. E. (eds.) Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito, Ecuador: IAEN-CIESPAL, disponible en http://book.floksociety.org/ec/0/el-proceso-buen-conocer-flok-society

Copyright/Copyleft 2015 FLOK Society / Buen Conocer, Xabier E. Barandiaran, David Vila Viñas & Daniel Vázquez, bajo las licencias Creative Commons BY-SA (Reconocimiento compartir Igual) Ecuatoriana (v.3.0) e Internacional (v.4.0) y GFDL (Licencia de Documentación Libre de GNU)

CC BY-SA: Creative Commons Reconocimiento Compartir Igual 3.0 Ecuador y Creative Commons Reconocimiento Compartir Igual 4.0 Internacional

Usted es libre de copiar y redistribuir el material en cualquier medio o formato, remezclar, transformar y crear a partir del material, para cualquier finalidad, incluso comercial. El licenciador no puede revocar estas libertades mientras cumpla con los términos de la licencia. Bajo las siguientes condiciones: a) Reconocimiento: debe reconocer adecuadamente la autoría, proporcionar un enlace a la licencia e indicar si se han realizado cambios. Puede hacerlo de cualquier manera razonable, pero no de una manera que sugiera que tiene el apoyo del licenciador o lo recibe por el uso que hace; b) compartir igual: si remezcla, transforma o crea a partir del material, deberá difundir sus contribuciones bajo la misma licencia que el original. No hay restricciones adicionales, no puede aplicar términos legales o medidas tecnológicas que legalmente restrinjan realizar aquello que la licencia permite. Puede encontrar las licencias completas en los siguientes enlaces: https://creativecommons.org/licenses/by-sa/4.0/deed.es_ES y http://creativecommons.org/licenses/by-sa/3.0/ec/legalcode

GFDL: Licencia de Documentación Libre de GNU

Se concede permiso para copiar, distribuir y/o modificar este documento bajo los términos de la licencia de documentación libre GNU, versión 1.3 o cualquier otra versión posterior publicada por la Free Software Foundation; sin secciones invariantes ni textos de cubierta delantera, tampoco textos de contraportada. Una copia de la licencia se puede encontrar en http://www.gnu.org/copyleft/fdl.html

1. Introducción

La metodología participativa, colaborativa y abierta articulada desde el comienzo del proyecto Buen Conocer / FLOK Society merece un capítulo propio. Los motivos son diversos. Por un lado, la metodología utilizada da solución a un problema de complejidad productiva de considerable magnitud: desarrollar una investigación colaborativa y un diseño participativo de políticas públicas orientadas a servir de insumo al cambio de matriz productiva en el que se ha embarcado el pueblo ecuatoriano. En sí mismo, éste hecho constituye ya un reto, que todavía adquiere mayor complejidad si el objetivo del proyecto abarca desde las infraestructuras digitales a escala nacional, hasta los saberes de las comunidades originarias, pasando por la planificación de recursos educativos abiertos o el desarrollo de modelos sostenibles de producción cultural, así como políticas públicas de migración al software libre o de protección de la biodiversidad. La tarea resulta aun más compleja si no solo se pretende intervenir en la fase de diseño, sino que se busca realizar un análisis específico sobre dichas áreas y anticipar dificultades de implementación, evaluación, etc. Se trata de un reto sin precedentes que ha exigido articular la contribución de agentes muy diversos: desde investigadores internacionales a movimientos sociales, desde la Administración Pública a comunidades indígenas.

Una visión común unía a todas estas áreas: la emergencia de nuevas formas de articulación de una economía política del conocimiento, entendido como un bien común sustentado en infraestructuras abiertas y modelos de producción cognitiva libres, comunitariamente gestionados y participativos. Por eso mismo, la metodología utilizada en FLOK no era simplemente la respuesta a la complejidad de aquel reto, sino también, y de manera más significativa, la respuesta a una necesidad política y productiva: mostrar y crear prototipos de cómo se genera conocimiento común y abierto, prefigurando el modelo de sociedad que se proponía. En este sentido, la metodología del proyecto no ha guardado una relación meramente instrumental con sus objetivos, sino que los medios han devenido un fin en sí mismos. De este modo, se entiende que el contenido que sigue no sea un simple informe, sino uno de los resultados más valiosos de esta experiencia, como es el análisis del proceso en sí mismo considerado.

Con el objetivo de que pueda ser replicado, de que pueda inspirar futuras iniciativas hermanas, documentamos a continuación tanto la arquitectura del proceso de investigación y participación como algunos de los resultados que no tienen reflejo en el resto de los documentos que componen este libro.

En cierto sentido, la arquitectura de la participación y el proceso de colaboración han sido organismos vivos durante estos casi dos años, sometidos a cambios institucionales, a contextos variables, modificados por las personas que participaron y encarnaron los procesos. Lo que presentamos a continuación es un híbrido entre algunas de las propuestas presentes en el diseño original y la forma en que estas evolucionaron para realizarse finalmente. Hemos intentado destilar, de esta combinación, aquellos aspectos, métodos, códigos, protocolos y mecanismos que mejor puedan ayudar a replicarlo en otros contextos o escenarios.

2. Arquitectura general del proceso FLOK y principios organizativos

2.1. Arquitectura de la participación

La arquitectura general de Buen Conocer / FLOK Society puede capturarse en dos imágenes que sirvieron a la vez de guía y repositorio del proceso, de andamio sobre el que construir diálogo, capacidades productivas, y desarrollo de textos y dispositivos de participación y comunicación. La Figura 1 ilustra el plan de lanzamiento, desarrollo y culminación del proceso desde su comienzo hasta la Cumbre del Buen Conocer, dividido en capas de interacción, desde las más presenciales (abajo) hasta las más abstractas (arriba). Estas capas son los espacios en los que diferentes grupos de personas o agentes sociales interactúan entre sí produciendo documentos que van evolucionando, hasta desembocar en la cumbre. Describimos estos elementos con más detalle posteriormente.

Mapa_FLOKFigura 1: Arquitectura general del proyecto Buen Conocer / FLOK Society.

Las capas de interacción, como decíamos, van de lo más concreto y presencial (abajo) a lo más abstracto y asíncrono (arriba). Así la primera capa la constituyen reuniones, encuentros, mingas y cualquier forma de interacción presencial entre personas, agentes e instituciones. Las siguiente capa es la de las reuniones virtuales a través del servidor de audioconferencias Mumble9. La siguiente capa, de interacción semisincrónica, la constituye el pad, que permite la escritura colaborativa en tiempo real entre hasta dieciséis personas y que ha servido para diseñar documentos, tomar actas de reuniones o planificar campañas de comunicación. Un capa que no está reflejada en la Figura 1 es la capa de las listas de correo (véase la sección 4.1) en la que han tenido lugar un gran número de interacciones que han guiado y construido todo el proceso. La wiki es la siguiente capa. Allí se han ido sedimentando algunos documentos, así como planes de investigación y manuales o guías de cómo participar en el proyecto. Finalmente, la última capa la constituye la propia página web, más estática, pero que, por un lado, ha permitido crear noticias y, por otro, publicar los resultados de la investigación (en la sección 4.1 se describe en más detalle el software Co-ment que ha permitido discutir en línea los documentos). Los comentarios abiertos en la página web también han servido como espacio de interacción.

El proyecto se diseñó originalmente para la interacción entre tres grupos principales de personas: (a) un grupo promotor del proyecto que incluía equipos de investigación, coordinación, comunicación y administración (en amarillo en la Figura 1), (b) una red de expertas/os de carácter regional e internacional (arriba en azul) y (c) una amplia base de participantes diversos incluyendo a la sociedad civil, activistas, hackers, indígenas, líderes comunitarios, servidores públicos, etc. (abajo en verde). La pertenencia a los grupos no se pensó de manera excluyente ni exclusiva: una experta internacional podía perfectamente incluirse en la base social, así como una servidora pública en la calidad de experta. La diferencia fundamental entre los grupos reside en el tipo de función que desempeñan en la arquitectura de la participación: al grupo promotor se le presume un compromiso permanente y dedicado (con una remuneración o contrato temporal durante la duración del proyecto); al grupo de expertas/os se le presupone una contribución de calidad, la capacidad de sostener un debate en detalle desde su área de experticia; y al grupo más general de participación se le supone una contribución más genérica y distendida, sin que ello impida una dedicación más intensa de manera puntual o permanente.

Descritos los agentes y las capas de interacción, conviene describir el despliegue temporal del proceso, que se ha articulado principalmente a través de los documentos. Comenzando por el documento madre (Barandiaran y Vázquez, 2013), discutido por expertas y abierto a la sociedad civil e instituciones, así como modificado con los aportes realizados. Este documento recogía las arquitectura básica del proyecto, calendario, definición de equipos y personal, mecanismos de participación, áreas de investigación, etc. A partir de este documento, el trabajo se centra en los documentos base, divididos en áreas, que se fueron elaborados por fases y se discutieron, revisaron y comentaron en diferentes contextos y a través de diferentes herramientas (véase sección 3). Todo el proceso culmina en la Cumbre del Buen Conocer10, cumbre multicapa, donde las mesas de trabajo permiten una interacción entre los tres grupos, centrada en la discusión de los documentos previamente disponibles y discutidos en la red y en reuniones específicas de trabajo. A partir de la Cumbre, puede elaborarse una versión mejorada de esos documentos, integrando las aportaciones de las mesas de trabajo dentro de una nueva labor específica de investigación, que finalmente se publican en la web y en este libro.

La Figura 2 muestra la configuración organizacional del proceso, proyectada en enero de 2014. Los círculos pequeños indican personas, los cuadrados pequeños representan a instituciones y los grandes círculos superpuestos indican espacios de interacción (espacios productivos en línea continua y espacios de comunicación en línea discontinua). Pueden observarse también los documentos, sus diferentes versiones y la relación con los mismos desde diversos espacios de interacción. El funcionamiento y composición de los equipos de trabajo y las interacciones está descrito con más detalle en la sección 4.4.

organigrama_FLOKFigura 2: Diagrama organizacional del proyecto Buen Conocer / FLOK Society.

2.2. Principios organizativos

El reto planteado era, como decíamos, extremadamente complejo. Requirió integrar expertos internacionales, investigadoras académicas, hackers, juristas, líderes de comunidades, activistas, empresarios… en un proceso de investigación que debía permitir la definición y la concreción de políticas y principios reguladores para un modelo de sociedad productiva del conocimiento abierto y común.

Introducimos a continuación una serie de principios organizativos que sirvieron para definir la arquitectura del proceso.

  1. Conceptualizar y procedimentalizar. Se proponía trabajar desde el mismo documento madre a partir del concepto de proceso abierto. No hablar solo de evento o congreso (que es un momento, una foto, un instante del proceso). Tampoco, de un gran documento (que es un resultado). Hablamos de proceso, de crecimiento, de desarrollo, devenir de la Pachamama del conocimiento. Un proceso-modelo, replicable, replicante, ejemplar, performativo, fertilizador y territorializado. Abierto y en red el proceso mismo, no solo sus resultados o cumbres. Sobre todo se buscaba asentar las bases de un marco conceptual de lo que significa un proceso constituyente del sumak yachay (buen conocer) y sus resonancias con la cibercultura del procomún.

  2. Pensar, investigar, aprender. No habrá cambio de matriz productiva si no conseguimos ir más allá del conocimiento disponible en la actualidad. Este proceso requiere desplegar una red de investigación global y local que haga posible un diseño efectivo y operativo de la nueva matriz. Al mismo tiempo, los agentes implicados aprendemos haciendo (en el más puro estilo constructivista) en este mismo proceso de investigación-producción.

  3. Comunicar, seducir, invitar. Se necesitaba un grupo de comunicación fuerte que tuviera al menos dos vertientes: una social y otra técnica. El objetivo ha sido crear una narrativa nacional alrededor de este tema, con un lenguaje directo y potente. Otra narrativa atractiva para el mundo técnico, centrada en el reto que supone investigar y diseñar un proceso de sociedad del conocimiento común y abierto, susceptible de movilizar a hackers, investigadoras, pensadores, desarrolladores, juristas, etc.

  4. Conectar. El proceso tenía que conectarse con un crecimiento sostenible. No basta con conectar a los hubs (los nodos centrales del desarrollo nacional: ministras/os, altas funcionarias/os…), que ya se encuentran hiperconectados y saturados. Tampoco basta con conectar (solo) siguiendo el modelo broadcasting (uno-a-muchos, micrófono-masas, streaming) ni conectar aleatoriamente con el mayor número de gente posible. Se trata de conectar más allá de un criterio de escala (Barabasi, 2003; Borge-Holthoefer et al., 2011) a la estudiante de telecomunicaciones con Yann Moulier Boutang, al webmaster de la asociación de linuxeros con el artista del CAC, a Langdon Winner con la jurista intrépida, a Carolina Botero con la docente del IAEN, de una forma artesana y orgánica. El objetivo-deseo era conectar todas las escalas a través de conexiones improbables, enlaces de largo alcance, vínculos multiescala: afectar y transformar a través de la inyección, siembra y riego de procesos de crecimiento cognitivo abierto a todos los niveles y capaces de fomentar el desarrollo autónomo local. El resultado sería una retroalimentación natural y orgánica a escalas estatal, regional y global.

  5. Producir. El propio proceso de producción buscaba sedimentar una arquitectura de participación, de modo que el evento cumbre supusiera un incremento de la producción sobre el trabajo previo. En todo momento, se apostó por construir de forma colectiva dispositivos inacabados: documentos de trabajo, plataformas de producción, modelos, recursos en línea, discusiones abiertas… El proceso de producción se diseñó parcialmente dividido en sectores o dimensiones de la sociedad del conocimiento, de modo que fuera posible la realización de documentos específicos de política pública de carácter variado: mapas de redes vitales para el ecosistema tecno-cultural ecuatoriano, análisis de necesidades, potencialidades de crecimiento, identificación de sectores y opciones estratégicas, diseño de modelos de producción, etc.

  6. Igualdad e integración multicultural. No se podía dejar atrás a los sectores tradicionalmente excluidos del acceso al conocimiento y de la producción en el capitalismo cognitivo, tales como las comunidades indígenas, las mujeres y la población afroamericana. Su participación se entendía como prioritaria, debido a la enorme riqueza de sus prácticas. Cuestiones transversales, como el uso de un lenguaje no sexista y la atención a la plurinacionalidad del país, han sido muy relevantes en todo el proceso, aunque aún queda un inmenso camino por recorrer en estos aspectos.

  7. Continuación, cuidado y monitorización. Dar continuidad a los resultados, tanto por áreas como en su implantación social, legislativa e institucional en los distintos niveles competenciales. Para ello es fundamental que la participación ciudadana ecuatoriana y global monitorice la evolución de los resultados y el diseño e implementación de las políticas elaboradas colectivamente durante el proceso. La creación de instituciones de evaluación ciudadana en este sentido resultaría fundamental.

  8. Crear prototipos de producción de conocimiento común y abierto. El proyecto mismo ha servido de modelo de producción de conocimiento: el software, la identidad gráfica, los textos, la economía, los convenios, la autoría y todos los procesos han sido accesibles y visibles, con licencias copyleft, garantizando una transparencia y auditoría pública ciudadana11, así como una reutilización y adaptación a otros contextos. El proceso del Buen Conocer / FLOK Society puede considerarse, según el argot hacker, un código fuente visible por todos y todas, mejorable por la inteligencia colectiva.

3. Agentes y escenarios sociopolíticos

Desde la perspectiva de la producción política del conocimiento, el proyecto Buen Conocer / FLOK Society pretendía operar como una instancia de (a) movilización social en torno a los agentes sociales comprometidos con el conocimiento libre; (b) llamada a la colaboración de diferentes investigadores (nacionales, regionales e internacionales); (c) eje de transferencia del conocimiento hacia instituciones públicas; y (d) participación social para diseñar colaborativamente propuestas de política pública, normas jurídicas y proyectos productivos susceptibles de orientar y acelerar el cambio de la matriz productiva, principalmente en Ecuador. El particular contexto ecuatoriano que se abrió en 2013, con la situación de una economía basada en el conocimiento común y abierto como horizonte del cambio de matriz productiva del país, así como su participación en los conflicto tecnopolíticos globales, ha dado prioridad a la perspectiva de los movimientos sociales en el diseño del proceso de investigación colaborativa y selección de las propuestas. Pero también se hizo necesaria la conexión con los actores clave de las entidades públicas capaces de comprender estas perspectivas, adaptar la discusión al marco de las políticas públicas y adoptar parte de las propuestas.

Un primer ejemplo de esta adaptación lo podemos encontrar en el convenio12 de colaboración entre instituciones que da cuerpo jurídico al proceso:

DECIMACUARTA: PRODUCCIÓN INMATERIAL

Las partes convienen en que la totalidad de la producción inmaterial que se obtenga en el proyecto a que se refiere el presente Convenio, así como los documentos, tecnologías, herramientas, conocimientos y cualquier otro resultado derivado del mismo, serán liberados por sus autores/as mediante licencias CC-by-sa 3.0 EC o GFDL, dependiendo del tipo de producto de que se trate, quedando por tanto obligados los y las autores intelectuales de los mismos a cumplir con dicha exigencia por el mero hecho de participar en el proyecto.

Por primera vez en Ecuador, tres instituciones discutían sobre la gestión de derechos de producción inmaterial en un convenio público, acompañados en la discusión por abogados de Creative Commons, activistas y académicos. El resultado es posiblemente uno de los primeros convenios interinstitucionales de carácter copyleft que podemos encontrar en el mundo13; al menos, así lo es en Ecuador.

3.1. La oportunidad ecuatoriana para una transformación global

El marco constitucional ecuatoriano y su desarrollo en los sucesivos Planes Nacionales del Buen Vivir (PNBV) ofrece un contexto muy oportuno para desarrollar diagnósticos e iniciativas productivas vinculadas al potencial del conocimiento libre y común. El mandato popular, expresado en el Plan Nacional del Buen Vivir 2013-2017, que establece «el objetivo de […] pasar de una economía basada en recursos naturales finitos hacia una economía sustentada en recursos infinitos, mediante una apropiación científica, económica e industrial, del conocimiento que permita fortalecer las capacidades de la población ecuatoriana» (SENPLADES, 2013, p.62), abre una oportunidad histórica. Se trata de hacer valer el potencial productivo del conocimiento desde unas condiciones de libertad, apertura, sostenibilidad y máxima participación de todas las capas de la población, tanto en las dinámicas productivas como en las de distribución de sus rentas y beneficios.

Sin embargo, la constitucionalización de un objetivo de este orden no resuelve la evidente complejidad de su consecución. El PNBV 2013-2017, que es un instrumento de planificación, especifica algunos objetivos, indicadores y acciones plenamente afines a la filosofía de los comunes y el conocimiento libre. Sin embargo, y precisamente por su carácter general y planificador, el PNBV no desarrolla estrategias detalladas en campos vertebrales para esta transición hacia una economía social del conocimiento común y abierto. En la dirección de esta transición, precisamente en el momento de la preparación del proyecto, se encontraba en fase de diseño el Código Orgánico de la Economía Social del Conocimiento (COESC+i), llamado a establecer la regulación básica sobre la propiedad intelectual y el ecosistema de investigación e innovación en que se debería desplegar esa transición. La posibilidad de realizar aportes a tal norma, así como de colaborar en su desarrollo mediante herramientas de wikilegislación14, también animó a desarrollar el proceso de investigación que podía concretar análisis y propuestas específicas en áreas fundamentales para hacer efectiva esa transición económica.

Por otra parte, la entrada de Julian Assange en la embajada de Ecuador en Reino Unido, situaba al país en el primer plano de las tensiones geopolíticas globales: conflicto del que no se excluye, sino todo lo contrario, el gobierno del conocimiento. Aunque en la actualidad exista cierta controversia respecto al reciente rol del Estado ecuatoriano en el tratamiento de los nuevos derechos digitales, la defensa de una gobernanza alternativa del conocimiento ha estado muy presente en el discurso público ecuatoriano15, hasta el punto de atraer a hacktivistas, desarrolladoras/es de software y creadoras/es en general que lo han identificado como un «paraíso del conocimiento» (Ramírez, 2014), en el que desarrollar su creatividad. Ecuador comienza a proyectar esta imagen, que pretende avalar con su compromiso institucional de defender ciertos derechos de acceso al conocimiento y planes de florecimiento de los saberes libres frente a los cercamientos de los poderes fácticos.

3.2. Desde los movimientos sociales

En junio de 2012, labSurlab16, un encuentro de movimientos sociales, hackers, creadoras y diversas comunidades, inauguró un espacio de discusión17 en Ecuador sobre tecnología, arte, cultura y comunidades, dentro del Centro de Arte Contemporáneo de Quito. La actividad tuvo el siguiente título: «Una vuelta al Sur. Por la construcción y evolución de maneras de acción colectiva. Hacia la experimentación y transformación de procesos sociales, a través de la apropiación y la creación en los intersticios de la ciencia, el arte y la tecnología». El encuentro labSurlab activó muchos procesos: fue el punto de partida de conversaciones entre distintos participantes y algunas de las redes invitadas para pensar mecanismos destinados a impulsar la transición de Ecuador hacia una economía del común. Aunque el proceso es policéntrico, labSurlab podría considerarse el germen del proyecto Buen Conocer / FLOK Society.

A partir de ahí, la conversación se traslada a un plano digital, donde continúa hasta que, en mayo de 2013, comienza a tomar cuerpo dentro de un espacio de trabajo en el Instituto de Altos Estudios Nacionales de Ecuador que, bajo la rectoría de Carlos Prieto del Campo, da un primer soporte institucional al proyecto.

Esta sedimentación institucional permitió fortalecer las dinámicas de participación del proceso que, en todo caso, necesitaban superar algunos factores de dificultad. En primer lugar, la propia financiación y alojamiento por parte de instituciones públicas, aunque preferentemente académicas como el IAEN, podían marcar un factor de desconfianza por parte de los movimientos sociales, acostumbrados a la asimetría en sus relaciones con el Estado (Tilly, 2004; DRC-Citizenship, 2010) y a dinámicas de cooptación o confrontación que dificultan el diálogo. En segundo lugar, la composición internacional del proyecto, unida a la lengua y al propio imaginario inicial, donde las tecnologías tenían un peso llamativo, añadieron ciertos obstáculos para ampliar la participación desde los movimientos sociales tecnopolíticos hacia capas más amplias de la sociedad civil organizada. En tales términos políticos, también es necesario disminuir la brecha que sigue abriendo la economía del conocimiento entre los saberes reconocidos como tecnológicos y los saberes populares y originarios, lo que fuerza a determinadas poblaciones a una posición de subordinación en esta nueva economía. Ello ha llevado a prestar especial atención a la función de los saberes ancestrales en la economía social del conocimiento y al incremento de la participación de la sociedad civil en general, a través de las siguientes acciones concretas:

  • Elaboración de un documento de investigación sobre saberes originarios y tradicionales (Crespo y Vila-Viñas, 2015), donde cabe destacar la incorporación de cinco intelectuales indígenas en la investigación (Tasiguano et al., 2014) y la celebración de una mesa de discusión dedicada a esta temática, que permitió reelaborar las recomendaciones sobre política pública en esta área.

  • Transversalización de este enfoque, que, al menos, se constata en los documentos sobre biodiversidad (Golinelli et al., 2015), agricultura (Dafermos y Vivero-Pol, 2015), territorialización del trabajo cognitivo (Figuereido et al., 2015) y cultura (Vila-Viñas et al., 2015).

  • Visitas científicas del equipo de investigación, comunicación y coordinación a proyectos comunitarios urbanos y rurales (cantón de Sigchos, Alianza Solidaria…), con el objetivo de alimentar los documentos y de trabajar conjuntamente en el diseño de algunos proyectos.

  • La organización Infodesarrollo (2014) realizó un conjunto de talleres18 en las veinticuatro provincias ecuatorianas que involucró a más de mil personas. A través de métodos de educación popular, se discutió la noción de economía social del conocimiento de manera descentralizada, con vistas a concretar y aterrizar la investigación posterior. Algunos de los talleres dieron lugar a grupos de trabajo en los territorios, que desarrollaron iniciativas en materia de salud, educación, cultura, acceso y uso de TIC. En general, los talleres visibilizaron la voluntad de las comunidades participantes de entender la economía social del conocimiento común y abierto en función de coordenadas fundamentales de su bienestar, como la salud o el acceso a los medicamentos, la educación y la obtención de rentas vinculadas al trabajo, y siempre desde un enfoque de derechos. Como contrapunto, las propuestas estrictamente basadas en la incorporación del conocimiento libre a la producción, especialmente a través de TIC y dentro de unos imaginarios tecnopolíticos arquetípicos, no encontraron el mismo nivel de implicación en los talleres (Infodesarrollo, 2014).

Por otra parte, el régimen del capitalismo cognitivo al que se contrapone la economía social del conocimiento común y abierto opera, aunque con especificidades nacionales e incluso relativas a determinados grupos de población, en un plano global. Por fortuna, la transnacionalización del conflicto siempre ha sido un rasgo característico de los movimientos tecnopolíticos, de modo que el trabajo con la sociedad civil se ha orientado también hacia su internacionalización. Se han realizado actividades a escala local, tales como como reuniones con el movimiento de okupación (Diabluma) o actividades como el wikisprint (Minga en Red). También se celebraron diferentes talleres y encuentros en El Diferencial (arte y tecnología en el Centro de Arte Contemporáneo de Quito). Se presentó el proceso en lugares tan diversos como la Contra Bienal de Arte de Cuenca, distintas universidades ecuatorianas, MediaLab Prado de Madrid, Arena Net Mundial de São Paulo19 o el Sharq Fórum20. En los últimos meses, este modelo se ha extendido con la participación en eventos en América Latina, como el Encuentro DxC21, el 1er Congreso Internacional de Tecnopolítica y Derechos Humanos22 y, en Europa, el Encuentro de Economía Social23 en Atenas, el Open Everything24 en Dublín, la conferencia anual de software libre en Göteborg o la organización de la mesa de conocimiento en el Congreso de la Red de Economía Social en Zaragoza25 (España), a lo que hay que sumar la reciente interacción con la candidatura municipalista de Barcelona en Comú (Cataluña), la colaboración con Syriza26 (Grecia) o la presentación del proyecto ante distintas comisiones del Parlamento Europeo27.

3.3. Intersección con instituciones públicas

La otra vertiente de la arquitectura institucional de FLOK se refiere a la redefinición de las relaciones con la Administración Pública. Desde una perspectiva administrativa el vínculo es doble, ya que FLOK se implementa dentro de una institución universitaria pública (IAEN), como un proyecto de investigación, aunque con una metodología colaborativa extendida, a la par que trabaja principalmente con dos instituciones del Estado (MCCTH y SENESCYT). La singularidad de esta relación va más allá de la habitual independencia de la investigación científica, en virtud de dos factores. En primer lugar, la relación interinstitucional permite ampliar el ámbito de acción política de las instituciones. Buen Conocer / FLOK Society no es un grupo de expertos o una consultora internacional con propuestas de política pública y proyectos productivos, sino que las recomendaciones que resultan del proceso de investigación y la actividad de comunicación configuran un plano político de enunciación-escucha que comparten agentes de los movimientos sociales y de la Administración Pública.

El otro factor de singularidad de esta relación se basa en la existencia de distintos ethos de diálogo por parte de los movimientos. En ocasiones, pueden realizar propuestas para estructurar y hacer sostenibles iniciativas que irrumpen por primera vez en el país, como pueden ser las distintas iniciativas de innovación ciudadana mediante dispositivos de hardware y una red institucional de fablabs o makerspaces (Lazalde et al., 2015). En otras ocasiones, los proyectos de los movimientos sociales pretenden redireccionar determinadas políticas públicas o, al menos, añadirles desarrollos críticos en relación con la estrategia central que las anima. Este sería el caso de los proyectos de empoderamiento ciudadano y del consumo energético en el contexto de las grandes políticas de incremento de la capacidad de producción energética del país (Dafermos et al., 2015). Por último, el trabajo con determinadas instituciones, como la Subsecretaría de Gobierno Electrónico, dentro de la Secretaría Nacional de Administración Pública, ha hecho patente las dificultades concretas para la migración a software libre de la Administración Pública ecuatoriana, mostrando la complejidad efectiva para ejecutar el Decreto 101428. Es decir, a partir de un determinado nivel de involucramiento de los movimientos sociales y de las comunidades internacionales de investigación, la relación con la Administración Pública tiende a complejizarse y a relativizar su tradicional inclinación a la asimetría.

4. Equipos de trabajo, dispositivos e infraestructuras para la investigación colaborativa y la coordinación comunicativa

4.1. Herramientas e infraestructuras técnicas libres y abiertas para la coordinación, la investigación y la comunicación

Como señalamos en el documento sobre ciencia (Barandiaran et al., 2015), la investigación abierta y participativa se construye mediante la accesibilidad, apertura e interoperabilidad de sus productos pero también de la libertad de sus infraestructuras de producción y de sus redes de organización. En este sentido, FLOK Society no solo ha pretendido que los resultados de la investigación fueran libres, sino también que lo fueran sus procesos y, para ello, es decisivo dotarse de unas herramientas de investigación libres. A continuación, detallamos las herramientas utilizadas y disponibles para articular el proceso de investigación, producción y comunicación:

  • Listas de correo abiertas. Ha sido la principal herramienta del trabajo colaborativo, distinguiendo listas de desarrollo, de investigación y de comunicación. Dentro de los parámetros de conducta de la netiqueta29, la participación en las listas era abierta. En algunas, como «investigación», el trabajo se realizaba preferentemente en inglés y en otras, como «comunicación», en castellano.

  • WordPress30. Esta herramienta se ha dirigido sobre todo hacia la comunicación, publicando los acontecimientos más importantes del proceso, indicando las vías de participación, las distintas fases de los documentos y la cumbre. Se ha realizado en dos idiomas y ha incorporado un software de encuestas.

  • MediaWiki de FLOK Society31. Es la plataforma wiki más completa y estable (la que utiliza Wikipedia). Permite control de versiones de diferentes documentos, fichas de usuario, subir documentos, etc. A las básicas, le añadimos las funciones propias de un wiki semántico, dos idiomas y control especial de versiones, idiomas y revisores o editores que den de alta nuevos cambios.

  • Mumble. Servidor de comunicación por voz que permite crear salas para reuniones de trabajo. El cliente de Mumble está disponible para Windows, Mac y GNU/Linux32.

  • Etherpad. Permite la escritura en tiempo real para dieciséis personas sin necesidad de crear usuarios y sin necesidad de identificarse.

  • Zotero33. Gestor bibliográfico libre para compartir las referencias utilizadas en la investigación, permite también incorporar y acceder a toda la bibliografía (más de mil ítems) de forma automática para cualquier persona que quiera retomar la investigación o acceder a las referencias que sirven de base a los documentos.

  • Co-ment34. Software libre para el trabajo colaborativo en textos. En una cuenta especial para FLOK Society, se han incluido todos los documentos de investigación del proyecto. En particular, ha permitido comentarios y respuestas referidos a aspectos concretos de un texto y tiene control de versiones, además de la posibilidad de descarga de los textos en distintos formatos. El acceso es abierto, incluso sin necesidad de identificarse.

Excepto en los casos de Zotero y Co-ment, ambos software libre, pero con una complejidad notable en su instalación, el resto de servicios han sido gestionados de manera autónoma por el equipo técnico del proyecto. La autogestión de infraestructuras tecnológicas y comunicativas abiertas es fundamental para garantizar soberanía tecnológica (Haché, 2014) y evitar la dependencia y la reapropiación del valor productivo de un proyecto cooperativo y abierto por parte de agentes contrarios a sus intereses. Igualmente importante ha sido la capacidad de adaptación del software a necesidades específicas del proyecto. Finalmente, la autogestión de los medios de producción y comunicación ha sido una condición esencial para evitar la potencial censura (y la autocensura) en el marco del dominante capitalismo cognitivo.

El uso de plataformas netárquicas y explotadoras de la riqueza colectiva de los comunes del conocimiento y la comunicación (como son Facebook, Twitter o Youtube) resultó inevitable, dada la necesidad de comunicar resultados y eventos a la sociedad en su conjunto y la extensa penetración de las redes sociales en las capas sociales tecnopolíticamente dependientes. No conviene olvidar que esta mayoría social era precisamente la destinataria de la narrativa de comunicación del proyecto y la invitada a participar en el mismo. Recurrir a estas plataformas fue objeto de largas discusiones en las listas de comunicación y coordinación, pero haber limitado las redes de comunicación a la reducida esfera de los medios propios y libres hubiera neutralizado el alcance comunicativo del proyecto a una marginalidad ya previamente convencida de los objetivos del proyecto, cuando no directamente implicada en el mismo. En cualquier caso, primó siempre el uso instrumental de estas plataformas y el principio según el cual toda la producción y la referencia última del proyecto, así como las infraestructuras «internas» de comunicación y coordinación, debían permanecer enteramente autogestionadas, liberadas con licencias abiertas copyleft y accesibles sin trabas tecnológicas, a través de formatos estándares abiertos y protocolos interoperables.

4.2. Plan de investigación

El plan de investigación fue uno de los primeros aspectos a desarrollar de manera abierta y participativa. Para ello, se convocó a diferentes movimientos sociales, personal investigador y personal de diferentes instituciones a participar en la presentación pública del proyecto el 2 de septiembre de 2013. A partir de un borrador preliminar, las líneas de investigación se discutieron y reestructuraron en diferentes grupos de trabajo. A principios de enero de 201435, con el equipo de investigación ya formado, se presentaron las líneas de investigación articuladas con más detalle. Las propuestas, el contenido general del plan de investigación, así como algunos lineamientos para la transición hacia la economía social del conocimiento común y abierto, pueden verse en el documento de Michel Bauwens (2014), director de investigación hasta junio de 2014, que aludía a las siguientes líneas y materias36:

  1. Desarrollar el talento humano.

    1. Recursos de educación abierta.

    2. Ciencia abierta.

    3. Cultura libre.

  2. Capacidades productivas orientadas hacia los comunes.

    1. Agricultura abierta y sostenible.

    2. Biodiversidad.

    3. Energía distribuida.

    4. Fabricación distribuida y diseño abierto.

  3. Institucionalidad de la economía social del conocimiento.

    1. Conocimiento social y economía social.

    2. Política pública para la economía social.

    3. TIC, datos abiertos y gobierno abierto.

    4. Política pública para el partner State.

  4. Infraestructuras técnicas abiertas.

    1. Software libre.

    2. Hardware libre.

    3. Conectividad.

    4. Ciberseguridad (integrado finalmente en los anteriores).

  5. Infraestructuras comunes del conocimiento en las comunidades.

    1. Territorialización del trabajo cognitivo.

    2. Saberes originarios y tradicionales en la economía social del conocimiento.

Aquí conviene incidir en una cuestión relativa a la dificultad de concretar las líneas de investigación propuestas. Debido al objetivo general del proyecto, la investigación se dirigió hacia distintas áreas que se consideraban estratégicas para la orientar la transición hacia la economía social del conocimiento común y abierto. La Cumbre del Buen Conocer reprodujo esa estructura, a través de un proceso de discusión, validación y reelaboración de las propuestas específicas en catorce áreas, correspondientes a las catorce mesas de trabajo y alcanzando una Declaración del Buen Conocer (Cumbre del Buen Conocer, 2014) que sintetiza las posiciones allí desarrolladas. El resultado de la mayor parte de los documentos resulta de gran valor (si atendemos a su capacidad integradora de propuestas y su sistematización) y contiene análisis y propuestas eficaces, no solo para Ecuador, sino para la implementación de esta economía en distintos contextos de América Latina y el mundo. Uno de los principales aprendizajes del proceso es que, cuando se pretende hacer efectiva una transición hacia la economía social del conocimiento común y abierto en un contexto determinado (un país admite la innovación pero nunca es un campo para experimentos), la exigencia en términos de especificidad, realismo, eficacia, concreción y escala de las propuestas es máxima. Casi todos los agentes con los que hemos dialogado en este tiempo repiten: «estamos de acuerdo en este objetivo de la economía social del conocimiento pero, ¿cómo lo hacemos aquí y ahora?».

Por otro lado, lo que el proceso de investigación ha puesto en claro es el fuerte vínculo contemporáneo entre la economía y la democracia. Existen distintos campos económicos donde los métodos democráticos de organización de la producción, generación de ideas e incluso articulación del conflicto político resultan condiciones imprescindibles para alcanzar cierta viabilidad económica. Las formas de agricultura comunitaria de India en resistencia frente a las corporaciones del agronegocio o los métodos de producción abierta del software libre o de dispositivos de innovación educativa son claros ejemplos. Por otro lado, es imposible pensar que la complejidad exigida por esta transición económica a las instituciones políticas en estos ámbitos pueda atenderse a partir de una inteligencia política concentrada en un solo órgano o cuerpo de gobierno. Durante la consolidación del liberalismo, la figura de la mano invisible operó como metáfora de la necesaria ignorancia del soberano acerca de los distintos procesos económicos y civiles que se producían en un país (Foucault, 2007, pp.320-322). Se produce hoy una inversión de esta figura. Para hacer realidad una economía social del conocimiento el «soberano» no tiene que ser ignorante, sino precisamente capaz de delimitar y alimentar un plano de producción distribuida del conocimiento en que pueda ser efectiva la inteligencia colectiva. Esto sustituye a la inteligencia centralizada de gobierno que, por ejemplo, lideraba las decisiones económicas y políticas durante la planificación estatista. En tal sentido, la democratización de la actividad pública en cuanto integración de la inteligencia colectiva en el saber de gobierno es condición política, pero también económica, para cualquier economía social del conocimiento común y abierto37.

4.3. Los documentos: estructura, niveles de autoría y fases de producción

Como apuntábamos anteriormente, los documentos base o documentos de análisis de las alternativas al capitalismo cognitivo y propuestas de política pública han servido para articular y sedimentar los frutos de la inteligencia colectiva durante el proceso Buen Conocer / FLOK Society. Esta función integradora y vehicular de la investigación ha exigido articular detalladamente la estructura, los modos de contribución, las fases de elaboración, las licencias de producción y los sistemas de escritura colaborativa y publicación abierta para los mismos. Inspirados en las formas productivas de código abierto del software libre (la apertura del proceso en forma de dispositivos inacabados abiertos a la contribución y testeo de usuarias/os y el control de versiones), el proyecto ha realizado un esfuerzo considerable por estandarizar, modularizar y estructurar los documentos y su proceso de producción. Detallamos a continuación algunos de los aspectos más relevantes.

a) Estructura de los documentos

Trabajar con un número considerable de documentos relativos a temas diversos pero orientados a una relación orgánica requería estructurar el contenido de una manera modular, que permitiera también un crecimiento gradual, de tal modo que cada uno de los momentos de crecimiento diera lugar a un documento que pudiera funcionar de manera más o menos independiente. Para ello, se acordó la siguiente estructura:

  1. Metadatos: área, identificador del documento, título, versión, autorías (edición, escritura, contribuciones, participación, revisión), resumen, palabras clave, historia del documento, cómo citar el documento, licencia copyleft.

  2. Índice.

  3. Resumen ejecutivo.

  4. Núcleo:

    1. Introducción y enfoque.

    2. Crítica a los modelos capitalistas.

    3. Modelos alternativos.

      1. Estudio de caso 1.

      2. Estudio de caso 2.

  5. Principios generales para políticas públicas y desarrollo de modelos sostenibles.

  6. Módulo 0. Marco jurídico-político ecuatoriano.

  7. Módulo 1. Recomendaciones de políticas públicas específicas para instituciones públicas y agentes sociales ecuatorianos.

  8. Módulo N. Otros módulos posibles para complementar el documento.

Trabajar bajo el paradigma de los comunes abiertos y colaborativos exige, en cierta medida, modular y preparar los resultados para una re-apropiación futura. Es por ello que el objetivo de esta estructura no es solo estandarizar el proceso de producción colaborativa, sino también facilitar su futura reutilización e inserción recombinante en otros posibles documentos, la Wikipedia, informes, adaptaciones a políticas públicas de otros países o documentos estratégicos de movimientos sociales, por poner algunos ejemplos.

b) Proceso de redacción, revisión, edición y publicación

Cada documento ha tenido al menos un editor, que ha garantizado el proceso de redacción y revisión del documento. También ha tomado la última decisión, junto al equipo de coordinación, sobre los aspectos más polémicos del contenido del documento, conforme a un criterio inclusivo y siempre que la discusión pública al respecto no haya resultado concluyente en los espacios de colaboración. En muchos casos y cuando no se indica específicamente el editor, éste ha coincidido con el/la autora principal del documento.

Cada documento ha estado a cargo de alguno de los y las integrantes del equipo de investigación o de una persona invitada o seleccionada bajo criterio de la comunidad FLOK o, en caso de divergencia, por el equipo investigador y el equipo coordinador. Tales autores, editores u otros miembros del proyecto realizaban un mapeo de las fuerzas productivas-cognitivas existentes en Ecuador, así como de sus posibles sinergias con sectores y redes globales. Expertos/as nacionales e internacionales, junto a miembros de estas redes, recibían invitación para sesiones de trabajo en línea en los Etherpad disponibles (ver sección 4.1) y por salas de voz del Mumble. Al mismo tiempo, se activó un plan de escucha y trabajo en las redes sociales (utilización de hashtags, debates digitales con streaming entre investigadores y sociedad civil, etc.)38.

Concluida la redacción preliminar de un documento, se envía a la lista de correo de «investigación». A la par que se discute en la lista, el equipo de investigación realiza una revisión interna. El objetivo era que los distintos borradores tuvieran alguna revisión, bien por parte de la comunidad, bien por parte del equipo de investigación, antes de discutirse y someterse a validación en las mesas de trabajo de la Cumbre del Buen Conocer.

Tras ello, los borradores se publican en la wiki, en inglés o en castellano, dependiendo del idioma original del manuscrito39. Esta versión de la wiki incorpora las sugerencias y modificaciones de las revisoras y la labor correspondiente del editor. Una vez se estabiliza la versión del documento o bien la comunidad considera que está suficientemente maduro, se congela en la wiki y se procede a la traducción del documento. Lista la traducción, se publicarán las dos versiones (en castellano y en inglés) haciendo uso del software Co-ment40 y se anunciará en la página principal de la web de FLOK Society. Como indicamos, las posibilidades de dicho software respecto a la realización de comentarios sobre el propio texto, así como ediciones, discusiones anidadas y la descarga del texto bien formateado, junto con las demás herramientas, permite abrir una fase de reelaboración colectiva, consulta, validación y análisis colectivo más abierto. En su conjunto, esta investigación colaborativa llegó a incluir, como veremos, cerca de mil comentarios realizados por más de cien personas diferentes.

Así pues, con carácter previo a su discusión en la Cumbre del Buen Conocer, se ha buscado que los documentos tuvieran una versión estable en castellano y que pudieran ser revisados por, al menos, un experta externa (peer reviewer). A partir de este punto, el proceso de discusión en la cumbre ha sido fundamental para validar y mejorar el contenido con la comunidad, devolviendo el documento a sus autores originales o designando, junto con la coordinación del proyecto, a una nueva autora encargada. La posterior síntesis de los comentarios elaborados dentro de las mesas de trabajo de la Cumbre y a través de las distintas plataformas públicas de discusión (sección 4.1) permitió la elaboración de una versión 1, que en muchos casos se encuentra muy próxima a la versión publicada aquí. En los casos en que dicha versión ha requerido un trabajo de edición y reescritura más intenso para su publicación, se ha alcanzado una versión 2, que es la que se encontrará en este volumen. Asimismo se ha buscado, aunque no se ha conseguido en todos los casos, que cada documento contara con la revisión de dos personas expertas y, a poder ser, también externas al propio proceso para que pudieran realizar una aportación crítica al documento.

c) Licencias

Tal y como recoge el convenio firmado entre el IAEN, SENESCYT y MCCTH, los documentos llevan una licencia Creative Commons BY-SA y GFDL. Las dos licencias son compatibles y hemos querido dar libertad a quien acceda a los documentos para copiar y distribuirlo mediante cualquiera de las dos opciones. Además, hemos añadido la licencia CC BY-SA 4.0 Internacional para garantizar la máxima difusión y cobertura legal de la producción. Un resumen de dichas licencias puede encontrarse al comienzo de este documento y en cada uno de los capítulos que lo acompañan. Aquí simplemente nos limitamos a señalar que estas licencias garantizan la libertad de uso, copia, modificación y redistribución de los textos, siempre y cuando estas libertades se garanticen en lo sucesivo. Ello evita que se cierre el proceso de colaboración y que alguna consultora, gobierno, corporación o entidad (pública o privada) pueda elaborar versiones que se privaticen o impidan que se difunda el contenido. Es esta última condición la que diferencia la licencia copyleft escogida del conjunto de licencias abiertas o de reciprocidad. No es casualidad. A escala global, uno de los peligros más acuciantes de los comunes del conocimiento libre es precisamente su apropiación en sistemas privativos. La elección de estas licencias es una apuesta política por mantener y reforzar la viabilidad de los recursos comunes, aquellos de los que nos nutrimos y aquellos que generamos.

Las licencias copyleft que hemos usado en el proyecto, al contrario que otras como la CC-by-nc (que no permite el uso comercial), o la Peer Production License (que solo permite el uso comercial a empresas o colectivos donde las/os trabajadoras/es son dueños y los beneficios repartidos entre las/os trabajadores), es compatible con la Wikipedia y otros proyectos masivamente extendidos. Amén de lo indicado desde una perspectiva general, nos hemos inclinado por esa forma de contractualidad libre, por una parte, porque los criterios de no comercialidad sobre los que pivotan las licencias de reciprocidad son difíciles de interpretar a una escala global sin hacer abstracción de la desigualdad de las condiciones concretas de la producción de conocimiento: ¿una escuela pública debe pagar regalías por nutrir a su alumnado de libros con contenidos bajo estas licencias de reciprocidad? ¿Una pequeña empresa de innovación ecuatoriana debe compensar al laboratorio de una universidad holandesa por sus aportaciones al común del conocimiento? Desde la perspectiva del Sur global, un uso expandido del conocimiento libre puede reducir costes de producción respecto a uno de los rubros que genera más desigualdad, como es el de los costes relacionados con propiedad intelectual.

En último término, es importante señalar que la condición de copyleft no solo abarca al producto final, sino a la posibilidad de abrir todas las fases del proceso de investigación: las referencias utilizadas, las discusiones de contenido, las referencias cruzadas entre los textos y la articulación de propuestas, etc. Todo ello aparta la metodología del proyecto de la simple agregación de autorías individuales.

d) Reconocimiento, renta de capital académico y niveles participación

La precariedad del mundo académico, en el que los sujetos investigadores se ven forzados a desarrollar una intensa empresarialidad de sí, exige poner en claro la distribución de los títulos de reconocimiento, que operan, con un valor dispar pero bastante estandarizado, como moneda en el mundo académico, susceptible de otorgar acceso a becas, fondos de investigación, permisos e incentivos salariales. Como muestra el documento sobre ciencia (Barandiaran et al., 2015), esta contabilidad individualizada del currículo y de la carrera académica contrasta con la creciente centralidad del trabajo colaborativo, como eje de los enfoques metodológicos más apropiados para alcanzar resultados de cierta envergadura y pertinencia. Ahora bien, ni la nueva centralidad que de facto ha alcanzado la cooperación en las prácticas académicas ni nuestro objetivo de hacer del método abierto de investigación tanto una política pública como una práctica académica, pueden implicar que las contribuciones de sujetos concretos se diluyan en un magma indiferenciado. Esto suele permitir que la entidad que actúa como paraguas y algunas de sus caras más visibles capitalicen todo el valor producido por el trabajo de investigación bajo una retórica de horizontalidad e igualdad formal de los y las participantes.

Al contrario, la naturaleza del proceso colaborativo, marcada por la heterogeneidad y la pluralidad en las contribuciones, es la que exige estandarizar los niveles de reconocimiento de las aportaciones. Desde esta perspectiva, hemos distinguido cinco niveles de contribución al documento, con especificaciones que evitan la arbitrariedad en la asignación de crédito y diferencian niveles y formas de contribuir, aunque por desgracia no todas ellas tengan el mismo reconocimiento consolidado en el ámbito académico:

Editor/a: Se encarga de la monitorización del texto, sus versiones, correcciones, estructuración, etc. Puede coincidir o no con alguna de las autoras. Se trata, en definitiva de un/a coordinador/a de la colaboración del texto. Es función del editor/a solicitar las revisiones y leerlas.

Autoras/es: Son autoras/es quienes propiamente han redactado el texto. El orden de los autores refleja la contribución de los mismos siendo el primer nombre el de quien más ha escrito. El/la autor/a habrá leído y revisado el texto en su versión final o en versiones anteriores pero no tiene por qué estar de acuerdo con la configuración final del texto, labor que queda en manos del o la editora.

Contribuidor/a: Aquí pueden considerarse dos grupos de contribuidores. Por una parte, los y las revisoras académicas del documento (en caso de que su contribución sea considerable) y, por otra, colaboradores/as externos/as cuya contribución haya sido de valor y se haya consolidado en partes de texto incluidas en el documento. La diferencia entre contribuidor y autor queda en manos del editor o del resto de autores pero, en todo caso, la contribución debe ser menor a la del resto de autoras/es. Como regla general, si un autor ha escrito menos del 10% del texto debería considerarse contribuidor/a. A su vez, ser contribuidor/a requiere al menos haber escrito dos o tres párrafos.

Participante: Se trata de una persona que, sin haber contribuido con una parte de texto específica al documento, ha realizado contribuciones de valor, como comentarios pertinentes en el Co-ment o ha proporcionado criterios, referencias o elementos de discusión valiosos.

Revisor/a: Esta labor incluye una lectura minuciosa de todo el texto, la corrección de errores y la propuesta de mejoras al mismo. Por lo general, es un trabajo por encargo (solicitado a una persona que se considera competente en la materia), aunque es posible que alguien contribuya haciendo una revisión sin solicitud expresa. En tal caso, la profundidad y calidad de la misma pueden calificar para considerar a esta persona revisora.

Traductoras/es: Aparecen en orden del número de palabras que han traducido. Puede figurar también una persona como coordinadora de traducción, de modo que sería ésta quien garantizaría la integridad de la traducción y su coherencia de estilo, en los casos en los que la traducción haya implicado a distintas personas que hayan realizado traducciones parciales.

En general, conviene que tanto autores como diferentes participantes en el proceso de escritura colaborativa tengan claras estas distinciones y puedan negociar o explicitar su nivel de contribución, antes, durante y después del proceso.

Añadimos, además, una sección de historia del documento en la que se resume la aportación de las/os diferentes autoras/es, dentro de un proceso en el que, a menudo, la autoría y responsabilidad sobre el texto han pasado por diferentes personas, procesos de discusión, mesas, revisiones, etc. En este sentido, nos ha resultado valioso considerar los documentos como entidades vivas, con su propia historia, alimentados por diferentes tipos de contribuciones.

4.4. Equipos de investigación y comunicación

Para llevar adelante buena parte de la tarea de autoría y revisión de los documentos, se seleccionó un equipo de investigación, cuyos lineamientos se desarrollaron inicialmente bajo la coordinación de Xabier Barandiaran y la dirección de Michel Bauwens (hasta julio de 2014), así como la de David Vila-Viñas posteriormente. La estructura del equipo de investigación quedó configurada del siguiente modo:

  • Potenciar la inteligencia colectiva. Coordinada por Daniel Araya y con la participación de Paul Bouchard, hasta marzo de 2014, y de David Vila-Viñas, desde julio de ese mismo año.

  • Capacidades productivas materiales orientadas hacia los comunes. Coordinada por George Dafermos.

  • Institucionalidad de la economía social del conocimiento. Coordinada por John Restakis.

  • Infraestructuras técnicas abiertas y libres. Coordinada por Jenny Torres.

  • Infraestructuras comunes del conocimiento en las comunidades. Coordinada por Janice Figueiredo.

Además, el equipo incorporó en marzo de 2014 a Juan Manuel Crespo, Nicholas Anastasopoulos y María José Calderón a estas labores de investigación y ha contado con la participación de una pluralidad de autores y expertos en la elaboración de documentos de política pública, como Antonio Calleja-López, Karina Vega-Villa, Stefano Golinelli, Fernando Villarromero, Beatriz Rivela, Panos Kotsampopoulos, Kostas Latoufis, Ioannis Margaris, Fausto Paulino Washima, Pere Ariza-Montobbio, Jesús López, Carolina Botero, Jorge Gemetto, Sylvie Durán, Pilar Sáenz, Pedro Soler, Mariangela Petrizzo, Alan Lazalde, Marlene Cabrera, Bernardo Gutiérrez, Ampam Karkras, Ana Lucía Tasiguano, Germán Cachiguango, Alejandro Lema, Carlos Yamberla y Xabier E. Barandiaran.

En el proceso de investigación expuesto, la labor del equipo de investigación resulta esencial pero no con el objetivo de cerrar el contenido de un campo, sino al contrario, para abrirlo, para realizar una delimitación inicial de ese ámbito y animar a partir de ahí la discusión con las instituciones públicas y los movimientos, comunidades y otros agentes sociales. Conforme a este método de investigación colaborativa que hemos desarrollado y del que hemos aprendido enormemente, la figura de investigador/a ha desplazado su rol desde la autoría de un contenido que refleja un conocimiento y perspectiva personales sobre un determinado objeto de estudio, hacia la figura de curaduría, animación y edición de un proceso colectivo de investigación. Se trata, en definitiva, de una desestabilización de las funciones habituales, los habitus y campos de fuerza que tradicionalmente sujetan la producción académica y que el proceso FLOK ha exigido transformar. Tal desestabilización ha afectado a la generalidad de participantes, sean representantes públicos y/o activistas sociales, que operan cada vez menos como representantes clásicos y más como canales y conectores en sus comunidades y áreas de competencia.

Dada la importancia de la participación en los procesos de producción de conocimiento en FLOK, la comunicación ha sido un plano fundamental. En el equipo de comunicación participaron un total de ocho personas. Bethany Horne estuvo a cargo hasta diciembre de 2013, alcanzando los objetivos de lanzamiento comunicativo del proyecto. A partir de enero, la coordinadora de la sección fue María Cristina Martínez. Formaron parte del equipo Nathalia Sánchez, Roberto Moreano, Hellen Cevallos, Roberto Núñez y Dyana Miño, además de contar con el apoyo del asesor internacional Bernardo Gutiérrez.

Este flujo de participación en labores de investigación y comunicación, entre otras, se articuló principalmente a través de algunas listas de correo electrónico, como puede verse en la Figura 3. Además de las listas de investigación y comunicación para las correspondientes funciones, operó una lista de desarrollo (llamada «dev», en honor a las listas de gestión de los proyectos de desarrollo de software libre), en la que se discutieron los principios y estrategias políticas y de coordinación de todo el proyecto, sobre todo durante los primeros meses.

metodologia_FLOKFigura 3: Red de mensajes a las listas de correo de comunicación (rojo), investigación (azul) y desarrollo o coordinación general (verde). Los círculos indican personas, emisoras de los mensajes a las listas (grandes círculos en el centro de la red). Las líneas indican interacciones (envíos de mensajes a la lista u otros destinatarios). La superficie de los círculos es proporcional al número de interacciones.

A lo largo del proyecto, se ha combinado la intensidad de la participación presencial y en línea. Los momentos iniciales y finales han aglutinado más participación distribuida, mientras que ésta se concentró, durante los meses centrales del proyecto, en el personal contratado y que desempeñaba sus funciones en el IAEN, en relación a lo que también jugó un papel importante la carga administrativa de los eventos y contrataciones de esos meses.

5. Cumbre del Buen Conocer

La Cumbre del Buen Conocer41, celebrada en Quito entre el 27 y el 30 de mayo de 2014, constituyó un hito en el recorrido del proyecto Buen Conocer / FLOK Society. Como se ha indicado al considerar el proceso de investigación, se trataba de poner en contacto a la mayor y más variada cantidad de expresiones de la inteligencia colectiva del país y de las redes internacionales de los comunes y el conocimiento libre, con el objetivo de impactar en la opinión pública ecuatoriana y latinoamericana respecto a la importancia de la economía social del conocimiento común y abierto. Asimismo, se buscaba el objetivo interno de validar y mejorar notablemente los documentos de política pública respecto a sus versiones preliminares. Desde nuestra perspectiva, el formato de esta cumbre, no como evento hacia la galería, sino como dispositivo de concentración del trabajo colaborativo y de tejimiento de redes merece un lugar destacado en el proceso colaborativo.

La Cumbre contó con casi doscientos invitados, el 21% internacionales, provenientes de España, Estados Unidos, Brasil, Grecia, Venezuela, Argentina, Canadá, Colombia, Francia, Italia, México, Uruguay o Reino Unido, entre otros (Figura 4).

Participacion_FLOKFigura 4: Proporción de participantes internacionales en la Cumbre del Buen Conocer por procedencia de país de origen.

5.1. Objetivos

La Cumbre del Buen Conocer se realizó con los siguientes objetivos:

  • Discutir los documentos de políticas públicas para desarrollar versiones definitivas y adaptadas para su posterior publicación y aplicación.

  • Socializar las propuestas de la economía social del conocimiento común y abierto entre representantes de instituciones públicas y movimientos sociales, con el objetivo último de favorecer compromisos institucionales de aplicación de esas medidas de transición económica. Para ello, las invitaciones se orientaron hacia actores clave dentro de las instituciones ecuatorianas y se discutió qué proyectos productivos y medidas de colaboración podrían resultar más viables.

  • Fortalecer el impacto regional de las políticas de transición hacia la economía social del conocimiento común y abierto, con especial atención a los marcos de UNASUR y la CELAC. Ecuador podría situarse de este modo como líder en la ideación y construcción de modelos y lineamiento políticos innovadores y sostenibles y en el diseño de alternativas económicas al capitalismo cognitivo global.

5.2. Metodología

Como en el conjunto del proceso de investigación, se buscó fortalecer las dinámicas colaborativas a lo largo de toda la Cumbre del Buen Conocer, que contó con los siguientes componentes:

  • Aparte de la introducción a la economía social del conocimiento común y abierto que supuso la sesión inaugural42, cada jornada se inició con dos breves conferencias, que situaron aspectos transversales de las discusiones de las mesas43.

  • Catorce mesas de trabajo, compuestas por miembros de las instituciones públicas, movimientos sociales especializados, autores y contribuidores del documento vinculado, expertos/as nacionales e internacionales y algunos/as de los/as participantes en los talleres territoriales sobre economía social del conocimiento realizados por Infodesarrollo. Aunque, al inicio de la Cumbre, cada mesa decidió su metodología de trabajo, la propuesta por defecto era discutir, cada uno de los días, sobre los aspectos teóricos y de enfoque de los documentos, las propuestas de políticas públicas y los proyectos productivos asociados, respectivamente.

  • Sesiones plenarias, celebradas al final del día en las que se compartían los resultados del trabajo de cada mesa.

  • Sesión de cierre diaria, compuesta por el grupo de coordinación de la Cumbre y las personas a cargo de la coordinación y sistematización de cada mesa. Una valoración de conjunto sobre la jornada permitió ajustar el funcionamiento de los días posteriores, incluido el acuerdo de elaborar una Declaración del Buen Conocer o Declaración de Quito al final de la Cumbre.

El trabajo realizado durante esta Cumbre en las distintas mesas permitió iniciar una nueva fase de investigación. En ocasiones, esta consistió en una mejora del texto sometido a discusión, mediante una serie de comentarios y adiciones, que incorporaron los propios autores originales. En otras, se decidió realizar un enfoque alternativo del texto, para lo que se buscó un nuevo editor o editora y un nuevo conjunto de autores/as. Incluso en algún caso, como en el texto de ciberseguridad, se decidió que su contenido fuera diseminado en los documentos de conectividad y software libre.

5.3. Declaración del Buen Conocer

La Cumbre del Buen Conocer tenía un aspecto de investigación vertebral. Sin embargo, el proceso Buen Conocer / FLOK Society en Ecuador se ha caracterizado por hibridar dinámicas específicamente diseñadas para la producción colaborativa de conocimiento con aspectos políticos. Ello ha ocurrido no solo por la matriz en que se generó el proyecto, a camino entre las instituciones públicas, la universidad y los movimientos sociales, sino por el hecho de que la transición hacia la economía social del conocimiento común y abierto no es un proceso técnico que vaya a imponerse por la simple calidad de las propuestas. La generación de alternativas al capitalismo cognitivo en las distintas áreas requiere de un impulso político basado en la voluntad de recuperar la soberanía y apropiarse colectivamente del conocimiento. En definitiva, se trata de levantar y proteger un hábitat cognitivo: un buen conocer para el buen vivir. En tal sentido, se valoró, por ejemplo, la conveniencia de realizar una Declaración del Buen Conocer o Declaración de Quito (Cumbre del Buen Conocer, 2014), que sintetizara la hoja de ruta para la transición hacia la economía social del conocimiento en las distintas mesas, correspondientes a áreas estratégicas para hacer efectivo tal cambio sistémico.

Un proceso de investigación colaborativa de este tipo también pretende favorecer los procesos políticos subyacentes, sin los que no es posible ni eficaz la producción de ese conocimiento compartido. La composición mixta, y en ciertos puntos antagónica, de tales procesos es susceptible de producir fricciones. Sin embargo, el resultado de la investigación colaborativa ha mostrado la existencia de una relación multidireccional en la producción de legitimidad entre los distintos actores. Movimientos sociales que han trabajado con tenacidad determinados asuntos aumentan su participación en la medida en que advierten la posibilidad de operar cambios concretos en la normativa vigente o en la política pública. El proceso del Buen Conocer / FLOK Society, especialmente la Cumbre, fue levantando nuevos espacios comunes de diálogo y construcción política, algo muy valorado por los movimientos sociales y el ecosistema activista ecuatoriano. Más allá de los espacios de participación formal, no es demasiado común que los representantes públicos puedan entablar un diálogo tendente a la horizontalidad con personas y grupos que tienen un alto conocimiento de temas específicos. Dicha convivencia entre ciudadanía y miembros de instituciones públicas amplía notablemente la visión de la gobernanza para los representantes políticos, hasta el punto de que puede incentivarles a apostar por cambios que antes les parecían poco claros o costosos. Ningún Estado es un conjunto monolítico, sino una composición de fuerzas variadas (Prieto, 2008), donde el empuje de servidores/as públicos/as de segundo y tercer nivel puede modificar su disposición de manera efectiva.

Por supuesto, una intencionalidad política de este tipo no solo requiere de una constante evaluación micropolítica, sino de una sostenida actividad de traducción. Dicha traducción no apela a la explicación de los discursos, sino a su adaptación a los públicos y no solo en cuanto al contenido, sino al habitus que acompaña a esos discursos (los ambientes de producción, las formas de enunciación…) para mejorar la capacidad de empatía y afectación de los distintos grupos participantes en favor del beneficio mutuo. Algunas participantes del proceso podrán confirmar que, bajo determinadas condiciones de trabajo colaborativo, es posible constituir un nuevo plano en el que es el sentido común de la economía social del conocimiento del área que se trabaja el que pauta la actividad, por encima de las agendas particulares previas más o menos afines. En este contexto, la legitimidad del discurso no solo viene marcada por la pulcritud académica de su contenido, sino por cuestiones metodológicas y micropolíticas, así como por la pertinencia política de su enunciación. El levantamiento común de un buen conocer se construye con ese latir colectivo, con esas conversaciones de muchos, con ese diálogo transversal, plural e interinstitucional.

6. Avances

La mayor parte de los resultados de investigación de este proceso deben hablar por sí solos a lo largo de este libro, pero quisiéramos destacar en esta sección algunos avances que, aunque difíciles de percibir a partir de la literalidad de sus capítulos, son una parte importante de los resultados, efectos y características de todo el proceso que hemos descrito.

6.1. Participación

Se han detallado distintas metodologías de investigación colaborativa capaces de hacer viable la pertinencia y máxima adaptación local del proyecto, en compatibilidad con unos planteamientos que son en muchos sentidos globales, tanto por el carácter globalizado del capitalismo cognitivo como por la necesidad geopolítica latinoamericana de transnacionalizar las estrategias relativas a la economía social del conocimiento común y abierto.

En síntesis, podemos remitir a un conjunto de indicadores de participación. Al momento de iniciarse la Cumbre del Buen Conocer, en mayo de 2014, la participación presencial podía medirse por:

  1. Talleres de Economía Social del Conocimiento (Infodesarrollo): veinticinco talleres en veinticuatro provincias, que contaron con más de mil participantes

  2. Reuniones de trabajo: sesenta y ocho reuniones con cuarenta y siete instituciones diferentes.

  3. En la Cumbre: ciento noventa y seis personas de más de cien instituciones, asociaciones, comunidades.

  4. Talleres puestos en marcha con colectivos locales, como el titulado Guerrilla Comunicación en El Diferencial (con Bernardo Gutiérrez) o los tres seminarios preparatorios de la Cumbre celebrados en el IAEN44.

A través de la red:

  • Web principal: 85.450 páginas vistas, ciento noventa noticias generadas.

  • Wiki: 46 secciones de contenido, 4.092 ediciones, 226.668 visitas.

  • Mumble: cuarenta y seis personas han participado en cientos de reuniones de coordinación.

  • Co-ment: 949 comentarios a los documentos con ciento cuarenta participantes.

  • Pads: 111 documentos colaborativos abiertos para coordinar actividades.

  • Listas de correo45: 2.234 mensajes y 137 participantes.

En total, estimamos que unas quinientas personas participaron de manera activa y directa durante el proceso, que llegarían hasta las mil quinientas de incluir a las que participaron en los talleres realizados por Infodesarrollo por todo Ecuador. Además, hay que considerar la participación interinstitucional, con un total de cuarenta y cinco entidades participantes en el proceso, veintisiete de ellas ecuatorianas. Algunos ejemplos:

  • Colectivos/Asociaciones ecuatorianas: ASLE, Usuarios Digitales, Coordinadora de Movimientos Sociales Por la Democracia y el Socialismo, Wikimedia Ecuador, Creative Commons Ecuador, Radialistas, Diabluma, Red de Innovación Educativa (RIE), Hackem, ECStartups, Sociedad de Divulgación Científica Quinto Pilar, Infodesarrollo, Colectivo Dogma, Fab Lab Cuenca, El Diferencial, entre otras.

  • Colectivos/Asociaciones internacionales: Ártica (Uruguay), P2PFoundation (Bélgica), SurSiendo (México), Universidad Nómada y Fundación de los Comunes (España), Código Sur (Uruguay-Argentina), Interdisciplinar (Brasil), La Casa Tomada (El Salvador), Wikimedia México, Parque Explora (Colombia), Mapping the Commons (España/Brasil), Global Commons Alliance, entre otras.

  • Instituciones nacionales: IAEN, SENESCYT, MCCTH, INER, Cancillería, SNAP, SENPLADES, MINTEL, Alcaldía de Sigchos, Ministerio de Educación, Centro de Arte Contemporáneo de Quito, CIESPAL, IEPI, entre otros.

  • Instituciones internacionales: Secretaría General de Presidencia de la República (Brasil), Participa.br (Brasil), Universidad Austral (Chile), Berkeley (Estados Unidos), UPV/EHU (País Vasco, España), Universidad Federal de Minas Gerais (UFMG, Brasil), entre otras.

6.2. Impacto mediático

La cultura comunicativa del proyecto fue transitando hacia la producomunicación46, en la que toda la comunidad comparte el proceso abierto, en una apuesta mixta inclinada a crear conexiones entre el ecosistema de redes planetario pero sin renegar de aparecer en los medios main stream. Los datos son elocuentes en cuanto a la eficacia de este modelo:

  • Contenido propio. Ciento noventa textos publicados por FLOK en su página web principal (floksociety.org), desde comunicaciones del proceso de investigación, hasta aportaciones de pensadores, colectivos, redes, activistas, alrededor del conocimiento libre.

  • Contenido en medios. El número de impactos en medios tradicionales fue importante. En total, ciento tres medios del mundo, cincuenta y seis ecuatorianos y cuarenta y siete internacionales, han hablado del proceso FLOK. Otros sesenta, dieron espacio a la Cumbre del Buen Conocer47. Entre ellos, cabe destacar TeleSur (Venezuela)48, El Diario (España)49, Página 12 (Argentina)50, Wired (Estados Unidos)51, Huffington Post Brasil52, Le Monde Diplomatique (Chile)53, Hoy (República Dominicana) o El Comercio (Ecuador).

  • Diálogo en redes sociales. Se usaron pads, además de algunas herramientas privativas, con prioridad de las herramientas libres en la medida de lo posible. FLOK tiene perfiles en Twitter, Quitter, Facebook, Flickr, Instagram, SlideShare o Rebel Mouse, entre otras. Al final de la Cumbre del Buen Conocer, la cuenta de Twitter de @FLOKsociety54 tenía en el medidor Klout55 (el principal para medir influencia) un valor de sesenta y tres (alto), igual que instituciones como SENESCYT e IAEN.

  • Acciones. El equipo de comunicación de FLOK, considerando que la información en la era red es conexión, planeó diferentes acciones, campañas, actividades o encuentros orientadas al conocimiento libre y a reforzar el proceso de participación. En la mayoría de ellas, se busca visibilizar en redes el proceso, convirtiendo, en algunos casos, el evento en Trending Topic en Twitter o Trendsmap. Destacan, por su importancia conectiva, la Carta Abierta de los trabajadores del procomún56, la Minga Tecnológica57, la Minga en Red (WikiSprint)58 o la campaña #LiberaConocimiento59.

  • Redes-territorios. En la era red es cada vez más importante trabajar bajo el paradigma de territorios híbridos. Redes analógicas y digitales, convergiendo en un mismo proceso. Para ello, se pusieron en marcha los ya mencionados talleres de la economía social del conocimiento común y abierto por parte de Infodesarrollo, los encuentros #Beer2peer en algunos bares de Quito60, la campaña sobre Eugenio Espejo Remix61 o la mencionada #LiberaConocimiento.

Como se indicó, FLOK ha iniciado diálogos en torno al conocimiento libre y a la economía social del conocimiento en distintos lugares de Ecuador y del planeta: MediaLab Prado, Arena Net Mundial o el Sharq Fórum (foro árabe iberoamericano), así como congresos en Colombia, España, Irlanda, Grecia, Suecia o la Comisión Europea. Desde una perspectiva de movimiento, conviene destacar la afinidad alcanzada con algunos movimientos sociales brasileños con larga trayectoria en esta materia, fortalecida tras la presencia de algunos de ellos en la Cumbre del Buen Conocer y la devolución de la visita de miembros de FLOK a finales de 2014. Ello está permitiendo trazar una estrategia para la posible réplica de algunos planteamientos del proyecto en el ámbito académico brasileño, así como para la escalada de sus contenidos y propuestas hacia UNASUR y la CELAC. Dentro de las propuestas políticas alternativas que emergen en Europa, se ha colaborado con miembros de Syriza (Grecia) y Podemos (España). Además de estos contactos, queda el legado de una multitud de conexiones productivas, tanto fuera como dentro del propio Ecuador62.

La hibridación política en favor de los comunes que ha tratado de favorecer el proyecto se sitúa en la cola de las comunidades protagonistas del largo ciclo de revueltas ciudadanas iniciadas en 2011: Primavera Árabe, 15M-Indignados España, Occupy Wall Street, #YoSoy132 de México y los colectivos brasileños que tomaron de forma masiva las calles en las denominadas jornadas de junio (Moraes et al., 2014). De cara a futuras experiencias, el software organizativo FLOK, beneficiario también de la propia composición militante del proyecto, ha mostrado cierta capacidad de mantener la colaboración con colectivos red que funcionan con identidades colectivas y trabajan de manera colaborativa y autónoma respecto a las instituciones públicas.

6.3. COESC+i y ecosistema regulativo de innovación

Aparte de la contribución a las políticas de transición hacia la economía social del conocimiento común y abierto en distintas áreas, la investigación Buen Conocer / FLOK Society ha coincidido en gran parte con la elaboración del borrador del Código Orgánico de la Economía Social del Conocimiento (COESC+i), norma que establecerá el ecosistema de investigación e innovación de Ecuador. Dicha reforma incluye, como primer paso, la reforma de la regulación de la propiedad intelectual, que data de 1998 y que constituye un verdadero obstáculo para la citada transición.

En la actualidad, el borrador de este documento se encuentra en discusión dentro de la Asamblea Nacional pero, en la plataforma wikiCOESC+i que señalamos (sección 3.1), pueden verse muchas de las contribuciones realizadas, mediante un trabajo de traducción y síntesis de los documentos y las discusiones mantenidas63. Al margen del contenido final del COESC+i, el ecosistema regulativo se completará en los próximos meses con un reglamento de desarrollo y un plan de economía social del conocimiento, que esperamos puedan nutrirse también de los análisis y recomendaciones de este libro.

6.4. Reformas institucionales y proyectos productivos

Por una parte, valoramos muy positivamente la visibilidad que las nociones de economía social del conocimiento común y abierto y de conocimiento libre han adquirido en Ecuador, especialmente entre distintas instituciones dedicadas al desarrollo y a la mejora del talento humano, movimientos tecnopolíticos y algunos espacios académicos. Sin embargo, el proyecto Buen Conocer / FLOK Society no es sino uno más de los agentes de un movimiento global de los comunes y el empoderamiento de los y las trabajadoras cognitivas. En cualquier caso, la transición hacia la economía social del conocimiento va a requerir una concreción y una atención a la implementación que va mucho más allá de este equipo. En algunos campos, como las regulaciones alternativas de la propiedad intelectual y la evolución global y regional del capitalismo cognitivo, es necesario profundizar las investigaciones para poder componer análisis situados de las evoluciones recientes del sistema-mundo, desde la perspectiva del interés común de la región. En otros campos, como el uso de software libre en las instituciones públicas, los ecosistemas de datos abiertos y la implementación de formas de participación política a través de TIC y de gobierno abierto, convendría investigar los procesos concretos de reforma que podrían catalizar estos procesos. Por último, existen áreas estratégicas para la economía social del conocimiento en las que se han podido formular además proyectos productivos que podrían liderar la innovación basada en conocimiento libre en el país, tales como la impresión 3D de prótesis sanitarias o la fabricación de maquinaria agraria básica, ambas basadas en diseños abiertos. En algún caso, como la empresa pública UPEx-Forma64, las propuestas de recursos de educación abierta de Buen Conocer / FLOK Society han podido desarrollarse hasta su lanzamiento como plataforma de formación masiva en línea (MOOC) de los y las servidoras públicas, en el contexto del IAEN.

El futuro del proyecto está marcado por esta doble necesidad. Concretar y hacer viables, en distintos contextos, procesos de reforma de la Administración Pública y proyectos productivos respecto a los que el éxito parece asegurado, pero cuya ejecución es imposible sin profundizar la apuesta por el conocimiento libre. Al mismo tiempo, es imprescindible reforzar los discursos y las hojas de ruta internacionalistas de mayor ambición teórica, capaces de favorecer esta transición en Ecuador y la región. La economía del conocimiento está ganando terreno a escala mundial pero se encuentra en disputa: la cuestión es si ésta transición va a ser una oportunidad para la emancipación de la inteligencia colectiva y si se va a producir bajo esas condiciones de acceso, utilidad social y sostenibilidad que harán conquistar a estos países su verdadera libertad y justicia social o avanzará el capitalismo cognitivo, una economía globalizada dominada por la distribución desigual del conocimiento y la jerarquía tecnológica. Movimientos sociales en todo el mundo y algunas pocas instituciones públicas hacen indefectible esta tendencia de la que FLOK Society es ya un reconocido catalizador en América Latina.

7. Referencias

Barabasi, A. L. (2003). Linked: How Everything Is Connected to Everything Else and What It Means. Plume.

Barandiaran, X. E., Araya, D., & Vila-Viñas, D. (2015). Ciencia: investigación participativa, colaborativa y abierta. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/1/1-2-ciencia-investigacion-colaborativa-participativa-y-abierta.

Barandiaran, X. E., & Vazquez, D. (2013). Sumak Yachay. Devenir Sociedad del Conocimiento Común y Abierto. Designing the FLOK Society (v1.6.2). Recuperado a partir de http://floksociety.org/wp-content/uploads/2014/04/Documento-madre1.pdf.

Bauwens, M. (s. f.). Transitioning to a Commons-Based Society (v. 1.0). FLOK policy paper 0.2. Recuperado a partir de http://floksociety.org/docs/Ingles/0.2.pdf.

Borge-Holthoefer, J., Rivero, A., García, I., Cauhé, E., Ferrer, A., Ferrer, D., … Moreno, Y. (2011). Structural and Dynamical Patterns on Online Social Networks: The Spanish May 15th Movement as a Case Study. PLoS ONE, 6(8), e23883. http://doi.org/10.1371/journal.pone.0023883.

Cerda, M. (2015). Flokeando en Ecuador. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/epilogo/flokeando-ecuador.

Crespo, J. M., & Vila-Viñas, D. (2015). Comunidades: Saberes y conocimientos originarios, tradicionales y populares. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/3/3-2-comunidades-saberes-y-conocimientos-originarios-tradicionales-y-populares.

Cumbre del Buen Conocer. (2014). Declaración del Buen Conocer. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/epilogo/declaracion-de-quito.

Dafermos, G., Kotsampopoulos, P., Latoufis, K., Margaris, I., Rivela, B., Washima, F. P., … López, J. (2015). Energía: conocimientos libres, energía distribuida y empoderamiento social para un cambio de matriz energética. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/2/2-4-energia-conocimientos-libres-y-empoderamiento-social-para-un-cambio-de-matriz-energetica.

Dafermos, G., & Vivero-Pol, J. L. (2015). Agroalimentación: sistema agroalimentario abierto y sustentable en Ecuador. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito: IAEN-CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/2/2-1-sistema-agroalimentario-abierto-y-sustentable-en-ecuador.

DRC-Citizenship. (2010). Putting citizens at the centre: Linking states and societies for responsive governance. Presentado en The politics of poverty, elites, citizens and states, Brighton: Institute of Development Studies. Recuperado a partir de http://www.drc-citizenship.org/system/assets/1052734690/original/1052734690-benequista.2010-putting.pdf?1398363967.

El 2015 es el año de la innovación en el Ecuador. (2015, enero 12). El Ciudadano. Recuperado a partir de http://www.elciudadano.gob.ec/el-2015-es-el-ano-de-la-innovacion-en-el-ecuador/.

Figueiredo, J., Anastasopoulos, N., & Cabrera, M. (2014). Territorial Organization of Knowledge and Physical Spaces (v1.0) FLOK policy paper 5.1. IAEN. Recuperado a partir de http://floksociety.org/docs/Ingles/5/5.2.pdf.
Foucault, M. (2007). Nacimiento de la biopolítica. Curso del Colegio de Francia. (H. Pons, Ed.). Buenos Aires: Fondo de Cultura Económica.

Freedom House. (2014). Freedom on the Net. Ecuador. Freedom House. Recuperado a partir de https://freedomhouse.org/sites/default/files/resources/Ecuador.pdf.

Golinelli, S., Vega-Villa, K., & VillaRomero, J. F. (2015). Biodiversidad: ciencia ciudadana, saberes ancestrales y biodiversidad aplicada en la economía social del conocimiento. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador, Ecuador: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/2/2-2-biodiversidad-ciencia-ciudadana-saberes-ancestrales-y-biodiversidad-aplicada-en-la-economia-social-del-conocimiento.

Haché, A. (2014). Soberanía tecnológica. En A. Haché (Ed.), Dossier sobre Soberanía Tecnológica (Ritimo, pp. 9-18). Recuperado a partir de http://www.plateforme-echange.org/IMG/pdf/dossier-st-cast-2014-06-30.pdf.

Infodesarrollo. (2014). Espacio para la difusión de la transformación de la matriz productiva hacia la economía social del (bio)conocimiento (p. 83). Corporación Red Infodesarrollo, SENESCYT.

Lazalde, A., Torres, J., & Vila-Viñas, D. (2015). Hardware: ecosistemas de innovación y producción basados en hardware libre. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito, Ecuador: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/4/4-1-hardware-ecosistemas-de-innovacion-y-produccion-basados-en-hardware-libre.

Moraes, A., Gutiérrez, B., Parra, H., Albuquerque, H., Tible, J., & Shavelzon, S. (2014). JUNHO. Sao Paulo: Friedich Ebert Stiftung. Recuperado a partir de http://library.fes.de/pdf-files/bueros/brasilien/11177-20150226.pdf.

Prieto del Campo, C. (2008). ¿Qué será de lo púbico. Lo público y lo común: Estado, derecho, Administración pública / poder constituyente, capitalismo, movimientos antisistémicos. Libre pensamiento, 59, 70-77.

Ramírez Gallegos, R. (2014). La virtud de los comunes: de los paraísos fiscales al paraíso de los conocimientos abiertos.

Restakis, J. (2015). Institucionalidad: sociedad del conocimiento, economía social y partner state. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito, Ecuador: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/3/3-2-institucionalidad-sociedad-del-conocimiento-economia-social-y-partner-state.

SENPLADES. (2013). Plan Nacional para el Buen Vivir 2013-2017. Secretaría Nacional de Planificación y Desarrollo. Recuperado a partir de http://www.buenvivir.gob.ec.

Tasiguano, A. L., Yamberla, C., Karkras, A., Cachiguango, G., & Lema, A. (2014). Saberes y Conocimientos Ancestrales y Tradicionales. Documento FLOK de política pública 5.3. IAEN. Recuperado a partir de https://floksociety.co-ment.com/text/2AJgGaYbiXv/view/.

Tilly, C. (2004). Social movements, 1768 – 2004. Boulder: Paradigm.

Vila-Viñas, D. (2015). FLOK Society en Ecuador 1.0. La transición hacia la economía social del conocimiento a pie de obra. P2P & Innovacao, 1(2), 86-95.

Vila-Viñas, D. (2014). Nuevas estrategias para el cambio: Buen Conocer FLOK Society. En C. Córdoba-Cely, H. Bonilla-Mora, & J. Arteaga-Romero (Eds.), Memorias del Primer Encuentro Internacional de Diseño: Diseño para el Cambio (pp. 77–87). S. Juan de Pasto, Colombia: Universidad de Nariño. Recuperado a partir de https://drive.google.com/file/d/0B9mdIqjV91JbUzZLbEFiNHl3ejQ/view.

Vila-Viñas, D., Botero, C., Durán, S., Gemetto, J., Gutiérrez, B., Saenz, P., & Soler, P. (2015). Cultura: acceso y sostenibilidad en la era de la cultura libre. En. En D. Vila-Viñas & X. E. Barandiaran (Eds.), Buen Conocer – FLOK Society. Modelos sostenibles y políticas públicas para una economía social del conocimiento común y abierto en el Ecuador. Quito: IAEN – CIESPAL. Recuperado a partir de http://book.floksociety.org/ec/1/1-2-cultura-acceso-y-sostenibilidad-en-la-era-de-la-cultura-libre.

Notas

1 Proyecto realizado bajo convenio con el Ministerio Coordinador del Conocimiento y Talento Humano (MCCTH), la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (SENESCYT) y el Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN) de Ecuador.

2 Dpto. de Filosofía y IAS-Research Center for Life, Mind, and Society, Escuela Universitaria de Trabajo Social, UPV/EHU (Universidad del País Vasco – Euskal Herriko Unibertsitatea).

3 Investigador invitado del Instituto de Altos Estudios Nacionales (IAEN), Ecuador, durante los meses de agosto de 2013 y enero de 2014.

4 Wikitoki (laboratorio de prácticas colaborativas), Bilbao.

5 Investigador principal proyecto Buen Conocer / FLOK Society. Becario postdoctoral Prometeo (SENESCYT, Gobierno de Ecuador), Instituto de Altos Estudios Nacionales.

6 Director del proyecto Buen Conocer / FLOK Society. Miembro fundador de alabs.org.

7 Periodista, medioactivista e investigador de redes. Fundador de la red de innovación FuturaMedia.net.

8 Véase http://floksociety.org/2014/11/10/2737/ y Vila-Viñas (2015).

9 Téngase en cuenta que, a menudo, se dibujan reuniones que atraviesan las capas virtual y presencial, ya que ha sido común la realización de reuniones presenciales con la participación de «ausentes» a través de Internet.

11 En tal sentido, puede consultarse una valoración técnica y económica del proyecto en http://floksociety.org/2014/11/10/2737/.

13 Analizamos las implicaciones de dichas licencias en la sección 4.3.c.

14 Con la ayuda inestimable de Isabel Estévez y Jorge Andrés Delgado, se implementó un wiki para atender a la participación de la sociedad civil y de los expertos de distinto tipo en la elaboración inicial de esta norma, trasladando la propia metodología de FLOK y alcanzando un primer resultado en la implementación de dinámicas de gobierno abierto. Puede verse el resultado de este wikiCOESC+i en http://coesc.educacionsuperior.gob.ec/index.php/C%C3%B3digo_Org%C3%A1nico_de_Econom%C3%Ada_Social_del_Conocimiento_e_Innovaci%C3%B3n.

15 Incluso el último informe de Freedom House (2014), crítico a este respecto con el Estado ecuatoriano, realza la importancia de la iniciativa FLOK Society en al transición hacia una economía social del conocimiento y en la defensa de los derechos humanos en el plano digital. Sin ir más lejos, 2015 ha sido declarado en Ecuador el año de la innovación, con especial atención a las políticas de conocimiento (El Ciudadano, 2015).

18 Véase http://www.infodesarrollo.ec/talleres-sobre-economia-social-del-conocimiento-recorren-el-pais/, donde se encuentran un conjunto de posts sobre la materia.

19 Espacio participativo del encuentro global Net Mundial de São Paulo, Brasil. Véase http://www.participa.br/arena/arena-net-mundial/.

20 Encuentro político social del mundo árabe y América Latina. Véase www.sharqforum.org/index_en.html.

21 Pasto, Colombia. Véanse http://artefacto.udenar.edu.co/dxc/ y Vila-Viñas (2014).

22 Bogotá, Colombia. Véase http://netconf.guru/.

27 El 17 de febrero de 2015, el proyecto fue presentado frente al grupo de Agenda Digital (DG Connect) del European Commission Directorate General for Communications Networks, Content & Technology, durante el evento “Shaping the Future of the Digital Social Innovation in Europe” [https://www.eventbrite.co.uk/e/shaping-the-future-of-digital-social-innovation-in-europe-registration-14720795295].

28 Véase http://www.espoch.edu.ec/Descargas/programapub/Decreto_1014_software_libre_Ecuador_c2d0b.pdf. Este decreto insta al uso de software libre en la Administración Pública.

36 Los documentos de política pública resultantes, en sus distintas versiones, pueden consultarse en este pad, utilizado para tener un esquema general de la producción investigadora del proyecto. Véase http://floksociety.org/pad/p/indice_Documentos_Investigaci%C3%B3n_Buen_Conocer.

37 Aunque de manera más clásica, las hipótesis del partner State son de algún modo concurrentes con esta posición (Restakis, 2015).

38 El siguiente post señala algunos de estos eventos ligados a la apertura de la investigación colaborativa, véase http://floksociety.org/2014/03/18/primer-hangout-de-flok-society/.

40 Véase http://www.co-ment.com y el site de FLOK aquí: https://floksociety.co-ment.com.

41 Véase http://cumbredelbuenconocer.ec/. Dirección científica, D. Vila-Viñas.

42 La Cumbre del Buen Conocer se inauguró con las intervenciones del Ministro Coordinador de Conocimiento y Talento Humano (Guillaume Long) y de la Subsecretaria General de Ciencia, Tecnología e Innovación (Rina Pazos), además de la conferencia inaugural de Xabier E. Barandiaran, que puede verse aquí: https://www.youtube.com/watch?v=-qvp7KplRQ8.

43 Durante la Cumbre del Buen Conocer, se pudo disfrutar con acceso libre de conferencias de Fander Falconí, Michel Bauwens, Yann Moulier Boutang, Carolina Botero y Miguel Robles-Durán.

44 Dentro del programa de seminarios Amawta del IAEN, se realizaron los siguientes seminarios. El primero de ellos, «Orientar el cambio de la matriz productiva hacia la economía social del conocimiento», con George Dafermos y Rubén Díaz (Vicepresidencia del Gobierno de Ecuador). El segundo, «La era de la tecnopolítica. Democracia y seguridad en el sur global», con Daniel Vázquez, Jenny Torres y Rommy Vallejo (secretario nacional de Inteligencia). Y el terceco, «Institucionalizar la solidaridad, encarnar la economía», con John Restakis y Hugo Jácome, superintendente de Economía Popular y Solidaria.

47 Se trata de datos recopilados en junio de 2014. Incluyen blogs.

55 Se trata del medidor más popular de la «influencia social» a través de redes sociales. Puede ampliarse información en http://en.wikipedia.org/wiki/Klout.

62 El último de ellos ha sido la colaboración con los movimientos de conocimiento libre de Venezuela para trasladar su perspectiva al proyecto de Ley de Conocimiento Libre del país, que adolecía de muchas de las visiones ya consolidadas entre los movimientos de los comunes en América Latina. Véase http://floksociety.org/2014/12/17/participacion-internacional-en-un-texto-alternativo-al-proyecto-de-ley-de-acceso-abierto-y-difusion-libre-del-conocimiento-de-venezuela/.

63 Pueden verse algunos de estos aportes bajo la referencia «FLOK» en esta página de discusiones. Véase http://coesc.educacionsuperior.gob.ec/index.php/Discusi%C3%B3n:LIBRO_III:_De_la_Gesti%C3%B3n_de_los_Conocimientos.